6. ÉTICA PROFESIONAL EN EL EJERCICIO DE

6. ÉTICA PROFESIONAL EN EL EJERCICIO DE

   CARGOS PÚBLICOS EN LA PROVINCIA

DE LEONCIO PRADO

"Es duro caer, pero es peor no haber intentado nunca subir"

Theodore Roosevelt.

La educación es una herramienta muy importante en la superación de las personas para sobrevivir y lograr mejores condiciones de vida en esta sociedad de consumo, elitista y explotadora. En donde los valores éticos han sido desplazados por la obtención de riqueza y poder para lograr supuestamente el bienestar y la felicidad. Esta forma de entender el comportamiento de las personas es normal en estratos sociales medios y bajos porque afanosamente buscan mejorar su condición económica, utilizando las “bondades” del modelo económico imperante.

 No interesa cómo obtener ganancias, por ejemplo: Los negocios más rentables de la sociedad moderna están en la venta de drogas legales e ilegales, es decir, quienes se dedican a negocios en donde hay consumo de alcohol (bares, discotecas, fiestas bailables, casas de citas,…) que se complementan con actividades ilegales (venta de PBC, cocaína, prostitución clandestina…). Algunos irresponsables, justifican estas actividades, manifestando que están contribuyendo con el turismo, porque “eso es lo que le gusta a la gente”.

En el país hay ciudades pasivas que son indiferentes a estas formas de influencia negativa en nuestros adolescentes y jóvenes, como costumbres sociales considerados “normales” e inclusive se confirma con el comportamiento de los adultos al ser los principales usuarios, especialmente en los fines de semana. Esta forma irresponsable de captar clientes se ve fortalecida con la publicidad en los medios de comunicación, sin importar el horario nocturno para estas clases de eventos (concurso de mariposas, miss y míster cachimbo, gay, travestis, vedetes,…) que nuestros niños observan obligatoriamente al hacer uso de los programas televisivos. Sin considerar los conflictos familiares que ocasiona la falta de ese dinero malgastado.

 Sin embargo, en las clases media hacia arriba (alta) que han accedido a una formación universitaria, hay otras formas “elegantes” de obtener riqueza y poder.  Veo con preocupación que los cursos de Ética profesional no han contribuido a fortalecer el comportamiento profesional porque no han desarrollado niveles superiores de conciencia que nos permita servir a la sociedad, practicando los principales valores de respeto, justicia, responsabilidad y vocación de servicio. El presente artículo obedece a una situación que rebasa el comportamiento ético de profesionales que buscan formas de obtener otros ingresos, en perjuicio del Estado y de muchos profesionales que carecen de un empleo acorde con su formación universitaria y porque no son del “partido” del  gobierno local de turno.

El antecedente de estos hechos “normales” en nuestra clase profesional, se ha dado especialmente en docentes universitarios que se han beneficiado en diferentes periodos de gobierno local provincial de Leoncio Prado, aprovechándose del bajo nivel cultural de la población y la tolerancia de los medios de comunicación. Haciendo compatible el ejercicio de docente universitario a dedicación exclusiva con la condición de regidor que gana una dieta, con el argumento que no es una remuneración y no hay incompatibilidad.

En la gestión anterior, del señor Juan Picón Quedo, se contempló y aceptó una irregularidad de un policía jubilado que recibe pensión del Estado y que ejerció la Gerencia de Asuntos Comunales, respaldado durante todo el periodo, por esta autoridad. Y como no ha pasado nada, no hay iniciativa fiscal, ni insistencia de OCI para frenar esta incompatibilidad laboral, se continúa con el mal ejemplo.

En la presente gestión se han presentado hasta tres casos. Con la diferencia que la prensa ha mejorado su trabajo y hace las denuncias públicas sobre estos hechos. Sin embargo, compartiré dos experiencias para impedir una tercera que en la semana que pasó ha ido tomando cuerpo de justificación y aceptación.

El primer caso, es del primer gerente municipal de la Municipalidad Provincial de Leoncio Prado, es docente a dedicación exclusiva de la Universidad Nacional Agraria de la Selva y con el respaldo del alcalde señor Pascual Guzmán Alfaro ha desempeñado el cargo de gerente municipal, considerado también a “dedicación exclusiva”. Menos mal ya dejó el cargo, después de un año, por la oxigenación de la gestión municipal empañada por presuntos delitos de colusión en perjuicio del Estado.

El segundo caso, es del primer regidor de la municipalidad provincial, es vicerrector académico a dedicación exclusiva y además percibe una dieta por su calidad de regidor. El argumento de siempre es que no hay incompatibilidad entre un sueldo y una dieta y que judicialmente demostrará la legalidad para desempeñar su actividad universitaria a dedicación exclusiva con una jornada de 20 horas semanales como regidor de la municipalidad, en observancia al artículo 11 de la Ley Nº 27972, Ley Orgánica de Municipalidades.

El tercer caso, que no debe prosperar es del Consejero regional que representa a la provincia de Leoncio Prado, mediante declaraciones públicas tiene la intención de aceptar la propuesta equivocada del alcalde provincial, para asumir el cargo de gerente municipal. Para ello, se está consultando al Jurado Nacional de Elecciones, si existe incompatibilidad en el desempeño de gerente municipal a dedicación exclusiva y consejero regional. Entonces, recurriendo a mi sentido común, respetando la opinión de abogados de la provincia, que presumo todos ellos, saben de la incompatibilidad, a excepción del interesado. Sostengo que es incompatible por la sencilla razón que el cargo es a DEDICACIÓN EXCLUSIVA, frente a su condición de consejero regional que tiene que asistir a las sesiones ordinarias y extraordinarias; integrar comisiones ordinarias, investigadoras y/o especiales; realizar la función fiscalizadora y probablemente presidir alguna comisión de trabajo.

Para que el JNE emita una opinión favorable, sería omitiendo la condición de “Dedicación exclusiva” del cargo de gerente municipal. Entonces, retomando la ética profesional pregunto: ¿Cómo los “asesores” del alcalde pueden aceptar semejante proposición? ¿Cuál es la calidad moral de los profesionales que forman parte del entorno de la autoridad local? ¿Cuál es la intención de volver a emplear a un ex gerente que fue retirado a escasos meses de trabajo? ¿Han considerado la posibilidad de otorgarle 80 horas mensuales por la función de consejero regional?

Finalmente, considero que hay una diferencia abismal en ser observador y ser responsable de la gestión pública, pero es bueno respetar las leyes, reglamentos, directivas y disposiciones del Sistema Nacional de Control para evitar problemas que nadie lo quiere. El alcalde anterior pecó al menospreciar a nuestros profesionales de la provincia, trayendo gerentes de otros lugares que terminaron cuestionados y procesados. En el presente caso, solamente tienen derecho de acceder a una gerencia, personas que apoyaron en la campaña, sólo ellos tienen derecho, sean profesionales o no. Craso error, que le volverá a costar el rechazo de la población y fortalecerá el proceso de revocatoria.

La crítica será una simple crítica si no hay propuestas, por lo que considero se debería realizar una convocatoria pública para cumplir con la ley, con el máximo del 5 % de personal de confianza, con los profesionales de la provincia, hacer prevalecer su condición de sindicalista que cree en la clase trabajadora que se supera mediante el estudio y logra una profesión y tiene derecho a participar en el desarrollo de la provincia. Señor alcalde, estamos en la Era de la información, del conocimiento, ya es tiempo de tener profesionales que asuman las diversas gerencias de la Municipalidad Provincial de Leoncio Prado.